lunes, 11 de enero de 2010

A MI NO ME PREGUNTES…

No vengas amigo mío a preguntarme sobre el amor, más yo me planteo lo mismo día a día. ¿Amar es acaso lo mismo que querer, que estar enamorado, que desear?, que tanto sabes tú y que tanto ignoro yo.
Tú como adolescente vas por el mundo repartiendo tu “amor fugaz” a diferentes mujeres, como si fuera un juego. Tal vez un día termines haciéndolo también con hombres ¿Por qué no?
Yo por mi parte un tanto adolescente y por desgracia un poco hombre, permanezco en la duda y en la pureza de un cuerpo propio y limpio, bastante codiciado. Somos pocos o prácticamente únicos los invictos a mi edad. Eso genera que me deseen
Pero nuestra filosofía es demasiado compleja para que tontos instintivos y salvajes como la mayoría lo son, puedan comprenderla.
Dime que es para ti el amor… ¿quizás sea cuerpo; sexo? ¿Qué hay de alguien que se ha encamado con más de una persona? ¿A amado quizás a todos ellos y luego los ha dejado de amar? No comprendo.
¿Cómo puede ser tan agradable ensuciarse con otro cuerpo y ensuciarlo tú también, y tiempo después “si te he visto no lo recuerdo”? Nosotros no somos animales mí querido amigo como para ir derramando esperma por diferentes cuerpos por el simple hecho de tener placer. Jugando tal vez con las personas como si fueran objetos y no sujetos. Recurre a tu mano mi amigo inepto si lo que quieres es placer, a ella no le hieres sus sentimientos…
¿Será sino el amor ese sentimiento que te aferra a una persona de gran manera que deseas estar todo el tiempo del mundo con ella? Como si nadie más existiera. Pero luego si esa persona se aparta, pasado un tiempo logramos olvidar todo y comprender que nadie es imprescindible, y es entonces que volvemos a comenzar; volvemos a “amar” una vez más.
En verdad me cuesta explicarte que es el amor porque lo desconozco, al igual que el acto sexual (si deseas saberlo), simplemente porque no le hallo sentido. Porque no he encontrado persona alguna aun hoy que merezca mis valiosos sentimientos sinceros, mi preciado cuerpo y mi supuesto amor. Valla si soy raro, más de lo que puedas imaginar; valla si escondo secretos que ni siquiera imaginas, y seguro que poseo una filosofía que pocos podrían entender. No es que me crea superior a otros, es que en cierto sentido y en algunos puntos en particulares poseo un grado de superioridad indiscutible. No es arrogancia; es sabiduría. Imagínate tú sino, sin entregarte a otro cuerpo a la edad que yo poseo… ¿Puedes verte?
Amigo mío… te he dicho varias cosas, pero no he respondido a tu incógnita, y sin dudarlo no lo haré. Tal vez un día tu mismo descubras lo que es realmente el amor, quizás solamente te conviertas en un inepto más como tantos los hay en este mundo, o podrías transformarte en un pobre prostituto que venda o hasta regale su cuerpo o ¿Por qué no?, quién te dice… y decidas seguir mi camino como el acertado…

sábado, 9 de enero de 2010

¿A DÓNDE TE HAS IDO?

Te he buscado ayer y hoy, y temo que siga siendo así mañana. Te he buscado de día y por la noche, e inseguro me encuentro de que llegue a perseguirte en mis sueños también…
¿A dónde has ido? ¿Escapas, buscas algo mejor o ya no te sientes confortable a mi lado?
Ya no sé si soy un amigo o un desconocido; más aun un forajido. Te veo y sin embargo mis ojos ya no te conocen. No eres aquel de un tiempo atrás. Quién una vez gozaba de vibrar tiempo conmigo. Hoy solo creo que el tiempo que estás a mi lado solamente lo quemas y para ti nada vale.
Te tengo tan cerca a menudo y sin embargo nuestros corazones están tal lejos. Quisiera abrazarte para sentir que aun eres mi amigo y que tu así también puedas recordarlo, y sin embargo tu cuerpo me repudia, me esquiva… ¿Me temes? ¿Qué es lo que en realidad piensas de mi?... esa es una pregunta que a menudo vaga en mi cabeza sin cesar, haciendo despiadados estragos en mi ser.
Hoy te he visto pasar por enfrente de mí, y claro tu mano alzaste para saludarme como siempre lo has hecho… pero no te detuviste un instante a charlar conmigo. A menudo me falta tu vos, tu palabra, tus necedades que tanto me fastidian a veces, pero que muchas más me han hecho reír.
No obstante no reprocho nada, ni a la vida por depararnos esto, ni a ti por escogerlo. Seguramente ahora tienes a tu lado a personas más confortables que yo, que te hacen sentir mejor y te llenan el alma. Seguramente debe ser así.
Yo puedo estar vacío pero siempre estaré conforme de que tú te sientas lleno y dichoso. Una vez dije lo valioso que eras para mí y cada día lo afirmo más a pesar de que tal vez nuestra distancia aumenta más y más.
Vive tú vida de la forma que mejor te parezca. Yo estaré aquí, hoy y siempre, por si algún día de verdad me necesitas, seguro me tendrás para socorrerte…