lunes, 28 de septiembre de 2009

ABRAZAMÉ MI AMIGA SOLEDAD

Eres tú la única que siempre está en mi compañía; aquella incapaz de abandonarme.
Pensé hoy que ya te marcharías y que el amor a mi vida vendría. Se me pasó por mi mente, que aquella chica podría hacerme sentir nuevo y diferente.
Pero no es posible que sea así. Es tan solo una niña. Mi vejez ante su inocencia marca una terrible distancia.
Mi mente dice que de pretender conseguirla sería un abusador; mi corazón en cambio insiste que el amor no conoce de edad, ni siquiera cuando esa diferencia sea grande.
¿Pero que tan poco importa cuando la diferencia física entre uno y otro realmente es significativa?
Me siento débil, y más ella es indefensa ante mí. La amistad puede traspasar fronteras de vez en cuando. Creo que esto pasó
A menudo te tengo tan cerca que con solo estirar mi mano podría acariciar tu angelical cuerpo, pero te siento tan lejos que un universo entero nos separa.
Eres un barco hermoso que navega hoy por un mar majestuoso, que es ese chico del que estás enamorada. Más yo soy un desierto por el que probablemente jamás caminarás.
Tú debes quedarte con él, aunque creo que no duren mucho tiempo más juntos. Yo no prometo esperarte, porque sería un idiota si buscara tocarte. Eres amiga y nada más para mi; igual yo para ti.
Una enorme distancia nos separa hoy, y así deberá ser por siempre.
Tú quédate con él, que mientras tanto yo me quedaré con ella. Mi eterna y fiel amiga… la soledad.

No hay comentarios: